Los gastos deducibles que se pueden incluir en la declaración de la renta
Agencia Tributaria refleja cuales son los gastos con posibilidad de deducción en la declaración de la renta 2025.
La fecha para la realización de la declaración de la renta ya está aquí. El próximo 2 de abril arranca la campaña de la declaración de la renta. Esta cita fiscal es clave para millones de contribuyentes en España, ya sea porque debes pagar una diferencia a Hacienda o se espera una devolución por su parte. Muchos ciudadanos ya se encuentran impacientes por dejar saldada la deuda con el organismo público, o por el contrario recibir el tan deseado ingreso.
No obstante, existen una serie de elementos a tener en cuenta de cara a la realización de la declaración de la renta. Estos pueden alterar en gran medida el resultado del ejercicio y hay que tenerlos en cuenta, un ejemplo de ello son los gastos deducibles que se deben incluir en la declaración.
Los gastos deducibles son aquellos que se pueden descontar de los ingresos brutos del contribuyente para calcular el impuesto que se va a pagar. Funcionan en base a la situación personal y profesional de cada individuo y se podrán desgravar distintos conceptos.
¿Qué gastos son deducibles?
Existen distintos tipos de gastos deducibles que tienen la posibilidad de reducir la base imponible, y con ello, la cantidad resultante de impuestos que deben ser abonados. Estos gastos dependen del tipo de actividad económica que realice el contribuyente o su situación personal.
Los gastos que se encuentran en posibilidad de deducción si eres autónomo o tienes una empresa están relacionados con la actividad económica. Son tales como el material de oficina y los equipos informáticos. Además del alquiler del local o despacho y los servicios de telefonía, internet y electricidad relacionados con la actividad. También son deducibles los gastos de transporte si se utilizan para la actividad, aquí entran por ejemplo el combustible o el peaje.
Entre estos también se encuentran los sueldos y salarios de los empleados, así como los seguros relacionados con la actividad económica. Además también podrán ser objeto de deducción los gastos de formación vinculados al trabajo o a la mejora de la propia actividad y las cuotas de la seguridad social.
Así mismo, existen otro tipo de gastos que pueden deducirse y que modifican la declaración de la renta, un ejemplo son los intereses de la hipoteca o los gastos de conservación y reparación de una vivienda, además de los donativos o las inversiones en patrimonio histórico.