Ganar un juicio tributa por IRPF a la hora de declarar.
Con la nueva reforma de la Agencia Tributaria, ganar un juicio podría salir "caro" a la hora de tributar.
Cualquier ciudadano que gane un juicio, tanto por ganar un pleito como por temeridad procesal de la parte contraria tendrá que añadir el importe de las costas en la base liquidable general del IRPF, aumentando la progresividad de los sueldos, pensiones, alquileres declarados y el resultado de los autónomos.
Los contribuyentes tampoco podrán deducirse los gastos de abogado y procurador asumidos en el proceso,ya que para la Agencia Tributaria los gastos jurídicos son "gastos debidos al consumo"